En muestras de moluscos bivalvos y camarones
Fonacit financia estudios que evitan enfermedades causadas por organismos acuáticos en el Zulia
La iniciativa de evaluar la calidad bacteriológica y virológica de moluscos bivalvos y camarones, además del agua de sus bancos de producción en el estado Zulia, contó con el respaldo del Fonacit
(13/11/2009) Según estudios realizados en el estado Zulia, se han incrementado, cada vez más, los índices de ocurrencia de enfermedades consideradas de transmisión hídrica tales como gastroenteritis, diarreas y hepatitis infecciosa; factor que hizo suponer a un grupo de científicos que el agua de la cual hace uso la población occidental, no cumple con los estándares de calidad sanitaria, evaluando que pudieran estar presentes en ésta, microorganismos patógenos causantes de infecciones.
Por esta razón, el Fondo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Fonacit), ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias (MCTI) financió el proyecto de investigación titulado: “Presencia de bacterias indicadoras de contaminación, enteropatógenas y virus entéricos, en moluscos bivalbos, camarones y en aguas de los bancos de producción de estos organismos en el estado Zulia”.
Los aportes asignados por el Fonacit para este estudio, fueron entregados a un grupo de investigadores pertenecientes a la Universidad del Zulia (LUZ), la Universidad de Oriente (UDO), el Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas (Inia-Zulia) y el Instituto de Biomedicina de Caracas; todos, sumaron esfuerzos con el propósito de determinar la presencia de virus entéricos en muestras de moluscos bivalvos y camarones.
Los basamentos del marco teórico de este proyecto sugieren que estas especies se destacan por ser importantes vehículos de transmisión de virus, debido a que la tendencia es a acumular numerosas bacterias en sus tejidos, gracias a los hábitos de alimentación a los que recurren.
Aunque estos virus generalmente no suelen ser nocivos para el animal, sí representan un alto riesgo para la salud de aquel que se convierta en su consumidor, pues, en los últimos años ha sido recurrente su ingesta y uso alimenticio para los humanos, gracias al avance de las técnicas de acuicultura en los países de América Latina.
La ingesta de los moluscos bivalvos y camarones se ha extendido de manera continua desde hace dos décadas y particularmente asociada a la pesca de camarones y peces. Los moluscos, y en particular los bivalvos, son actualmente el tercer grupo más importante de los organismos marinos en términos de la producción de acuicultura. En 2005, de acuerdo con los datos estadísticos suministrados por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), se han producido aproximadamente más de 130 mil toneladas para esta región. Esta producción, se ha duplicado desde el inicio de la actual década.
En efecto, los bivalvos se alimentan en el primer eslabón de la cadena de trófica y, por lo tanto, son una fuente relativamente económica de proteína animal saludable, comparada con peces y crustáceos. El aumento de la demanda de tales productos puede ayudar al sector de la acuicultura en la región para su expansión y proporcionar oportunidades de empleo y de negocio.
Pero, tanto la contaminación biológica del agua como los sedimentos presentes en las zonas de reproducción de moluscos bivalvos y camarones en el estado Zulia, incentivaron a las especialistas a trabajar y evaluar la calidad microbiológica de estos organismos acuáticos, y sus variantes en las premisas planteadas para la investigación realizada.
Los resultados del estudio arrojaron la necesidad de vigilar el control microbiológico de los ecosistemas, que funcionan como bancos naturales para la producción de estos organismos y que, además, son usados por la población con fines recreativos.
Por su parte, la investigadora Ligia Botero, aseguró al respecto que “la iniciativa permite establecer las medidas correctivas y preventivas, para lograr así disminuir el índice de enfermedades de transmisión hídrica que se están presentando en la región zuliana y mejorar así la calidad de vida de los pobladores”.
El logro de este grupo de profesionales marca un precedente para este tipo de investigaciones, según Botero, “confían en que la difusión de esta temática a través de programas de concienciación, sería de gran ayuda para que los miembros de las comunidades, mejoren su calidad de vida y manejen la información de primera fuente también”.
De esta manera, el Fonacit a través del financiamiento de diversos proyectos de investigación, nuevamente contribuye al cumplimiento de las metas acordadas en el marco de la “Cumbre del Milenio”, celebrada en el año 2000, así como con el Proyecto Nacional Simón Bolívar, para hacer de la investigación y el alcance de la soberanía científica, un derecho de los pueblos que contribuya a disminuir la mortalidad y morbilidad infantil, así como la protección de la sustentabilidad del medio ambiente.
Prensa Fonacit/Prensa MCTI