Programa Yaretanol pone a Venezuela en la vanguardia tecnológica
El Yare, líquido venenoso que se extrae de la yuca amarga al momento de hacer el casabe. Utilizando su ingenio tres emprendedores venezolanos: Valmore Hernández, ingeniero agrónomo; José Gregorio Jiménez, tecnólogo carabobeño y la ingeniera industrial, Ivanet Silva, empezaron a realizar estudios a esta sustancia determinando que a partir de la misma, se puede producir etanol y de allí nace el producto yaretanol
--------------------------------------------------------------------------------Utilizando su ingenio tres emprendedores venezolanos: Valmore Hernández, ingeniero agrónomo; José Gregorio Jiménez, tecnólogo carabobeño y la ingeniera industrial, Ivanet Silva, empezaron a realizar estudios a esta sustancia determinando, que a partir de la misma, se puede producir etanol y de allí nace el producto yaretanol. (Foto: Prensa MCTI/José G. Terán)
Publicado el 24/11/2010.
El petróleo se ha caracterizado por ser la principal fuente de energía en todo el mundo, sin embargo, por los terribles daños que le causa al ambiente, los humanos nos hemos vistos envueltos en los últimos años en grandes catástrofes naturales que han dejado huellas en algunos casos imborrables. En pleno siglo XXI cuando tal deterioro ambiental ha crecido tanto en todo el mundo, nace una esperanza que hace ver un futuro más promisorio para las generaciones de relevo, el Yaretanol o también conocido como el petróleo verde.
El Yare, es un líquido venenoso que se extrae de la yuca amarga al momento de hacer el casabe. Utilizando su ingenio tres emprendedores venezolanos; Valmore Hernández, ingeniero agrónomo, José Gregorio Jiménez, tecnólogo carabobeño y la ingeniera industrial, Ivanet Silva empezaron a realizar estudios a esta sustancia determinando que a partir de la misma, se puede producir etanol y de allí nace el producto Yaretanol.
El proceso para la obtención del Yaretanol consta de varias etapas. La primera es la recolección del yare, almacenarlo en tanques especiales adecuados en la zona y no en los sumideros donde se ha depositado hasta ahora. La segunda etapa es el traslado a la planta, donde se somete a un proceso de pasteurización para evitar la descomposición.
En la tercera etapa se filtra, se expone a calor y a un ataque enzimático para eliminar el cianuro y luego se desarrolla una cepa de bacteria, la cual consume los azúcares que contienen estos productos y lo transforman en los diferentes alcoholes. Dependiendo de la cepa utilizada se puede obtener etanol, butanol, izobutanol, propanol o ácido acético.
“Nosotros a través de estudios determinamos que es factible obtener a través del Yare, etanol, el cual es alcohol industrial, que tiene muchos usos, pero el más conocido es como el aditivo para la gasolina, para sustituir el tetradetilo de plomo y así obtener lo que se llama la gasolina de plomo”, explicó Ivaneth Silva una de las investigadoras y creadoras del llamado petróleo verde.
Combustible sano
A diferencia de otros países como Brasil o Estados Unidos que utilizan caña de azúcar o maíz para obtener etanol, en Venezuela se está comenzando a producir a través del Programa Yaretanol.
“Nosotros con este programa estamos promoviendo el no sacrificio de alimento para producción de combustible, no utilizar la caña de azúcar, que entre otras cosas encarece los alimentos, tampoco estamos de acuerdo con que el maíz que es la base de la dieta de las comunidades, se utilice para producir etanol. Todo lo contrario, nosotros decimos que debemos incentivar el programa Yaretanol porque más bien utiliza un desecho y fomenta la producción de alimento para los seres humanos”, afirmó Silva.
La ingeniera industrial explicó que mediante otros estudios se determinó que de la cáscara de la concha de la yuca se pueden obtener otros alimentos concentrados para animales, además de biocida orgánico que no hace daño, puesto que es muy distinto a los biocidas que se conocen comúnmente.
El Yaretanol, además de ser considerado potencialmente útil como combustible, también puede servir para la industria química en la elaboración de lacas, plásticos, anhídrido carbónico, biopolímeros, pinturas hidrosolubles, pegamentos, pesticidas, biocida, abono orgánico y la última prueba arrojó gas metano. En la misma forma tiene cabida dentro del sector farmacéutico, especialmente en aquellos productos utilizados para la desinfección y limpieza de hospitales y centros clínicos.
Sustitución de importación
La planta piloto del Programa de Yaretanol está ubicada en en el estado Carabobo, en el municipio El Rincón, Tucuyito. “150 casaberas que están asentadas en esta localidad, en un trabajo mancomunado y comunitario nos están vendiendo el yare, lo procesamos y lo convertimos en etanol y les estamos haciendo partícipe a ellos de las ganancias, no le estamos regalando nada, sino que ellos se lo están ganando”, destacó Ivanet Silva.
Este proyecto persigue la sustitución de la importación pues Venezuela consume diariamente 3 millones de litros de etanol que son importados de Brasil y con esta iniciativa lo que se busca es fomentar la industria venezolana en la producción de Yaretanol.
“Con el programa de Yaretanol, pretendemos que nuestro país se independice energéticamente del combustible fósil. Actualmente Venezuela tiene en su parque automotor una mezcla de gasolina-etanol 90-10, si nosotros incentivamos la industria de yaretanol, estaríamos sustituyendo ese 10% de la mezcla de gasolina. Tenemos un plan a 15 años que pretende aumentar esa concentración de etanol en la gasolina con los respectivos cambios en el parque automotor y que más adelante se pueda exportar a otros países como hace Brasil”, afirmó Silva.
La planta piloto tiene una capacidad de producción de 30 mil litros diarios y a futuro se estima producir 3 millones diarios en todo el territorio nacional, “estamos produciendo el 1% de la demanda nacional, tendríamos que ampliar al 100% para cubrir toda la demanda actual”.
Silva aseveró que a largo plazo tienen planteado crear 3 millones de puestos de empleos, “una industria completa en el sector de la biotecnología. Estamos en conversaciones con las comunidades para que se organicen, los casaberos y los sembradores de yuca amarga”.
Apoyo al productor nacional
“La idea es que los campesinos que antes sembraban yuca amarga ahora van a tener garantizada la compra de sus hectáreas. Nosotros podemos utilizar todos los tipos de yuca, no importa que estén fibrosos, enfermos, que tengan plaga, que estén inclusive podridos por la lluvia. Para nosotros todo eso es 100% utilizable, ellos allí tienen una garantía de que pueden vender el 100% de su producción”, destacó.
La idea es llevar el programa de Yaretanol a todos los estados que produzcan yuca amarga. “Estamos haciendo un convenio con la destilería El Recreo, que queda en Aragua, para que a través de nuestra tecnología empiecen a utilizar Yare y ya no producir ese tipo de alcohol de consumo humano, sino alcohol industrial al 65% que sería la base para lacas, pegamentos y todo lo relacionado con el sector químico”, puntualizó Silva.
En este sentido, para el desarrollo de este plan ya se han realizado varios trabajos a través de los Tribunales Agrarios, con los cuales se pretende impulsar la industria del Yaretanol a nivel nacional. “Básicamente nosotros podemos utilizar una instalación que se haya utilizado para destilar caña de azúcar, las adecuamos a nuestros procesos, ya que son los mismos (fermentación y destilación), la única diferencia está en la bacteria que desdobla el Yare que contiene cianuro y que lo convierte en etanol”.
Reconocimiento a esta ardua labor
El programa de Yaretanol ha recibido numerosos reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional. En el año 2008 ganaron el concurso Idea, donde las grandes empresas los eligieron como mejor plan de negocios de ese año entre 700 participantes. Luego fueron merecedores en el sector público del Premio Nacional de Ciencia y Tecnología en la mención Inventiva Popular. Recientemente en Amsterdam durante el Congreso Mundial de Biocombustible se llevaron la mención Green Shoot. Próximamente estarán en Dubai para obtener un reconocimiento como mejor práctica a la mejora de la calidad de vida.
En Panamá fueron invitados a participar en un encuentro científico empresarial en el área de biotecnología “y firmamos tres cartas de intención con los parques tecnológicos de Panamá. En Costa Rica y Dominicana están interesados en la transferencia tecnológica y en implementar el programa en sus respectivos países. Nosotros estamos dispuesto a hacer la transferencia tecnológica, a través de los países del ALBA, compartir con ellos estos conocimientos para que también emprendan sus respectivas carreras en contra del sacrificio de alimento y en contra del combustible fósil”, sentenció Ivaneth Silva.
Sin duda, el programa de Yaretanol representa una luz al final del túnel que de tener buenos resultados a nivel mundial, los seres humanos de esta era podremos soñar con un futuro mejor para el planeta, donde se pueda vivir y respirar un ambiente sano libre de toda contaminación, sintiendo el orgullo que tres venezolanos comenzaron a dar los primeros pasos.
--------------------------------------------------------------------------------Prensa MCTI/Luis Vásquez